Un golpe maestro. Se acabó el uso del sacapuntas. Su punta, ultra-fina y retráctil, permite realizar un trazo preciso, siguiendo la línea de las cejas, para lograr un acabado natural y perfecto que marca fácilmente las líneas y juega con las formas y los volúmenes.
Un golpe maestro. Se acabó el uso del sacapuntas. Su punta, ultra-fina y retráctil, permite realizar un trazo preciso, siguiendo la línea de las cejas, para lograr un acabado natural y perfecto que marca fácilmente las líneas y juega con las formas y los volúmenes.